Situémonos: Tal día como hoy hace cuatro años.
Has pasado tu betaespera. Te levantas y te preparas para hacerte un análisis de sangre. Hoy te dirán si oficialmente estás embarazada. Algún test ya da positivo. Sientes miedo. Ya te pasó antes y se quedó en ilusiones rotas. Test positivo pero beta baja. No llegó a cuajar.
Ves cómo se va llenando la jeringa de sangre y mentalmente repites: por favor, por favor, por favor.
Te vas a la oficina. el corazón en un puño. Has sido valiente hasta ahora. Has pasado por todo pero no tienes el valor de dar tu teléfono. Has dado el de Antonio.
Sobre las diez de la mañana recibes su llamada .
contestas y sólo oyes un grito:
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡YUJU!!!!!!!!!!
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