Pensamientos

Treinta y… todos

El pasado 15 de marzo celebré mi cuarenta cumpleaños. ¿Celebré? No. dormité mi 40 cumpleaños. Estaba con fiebre en la cama.

Siempre imaginé que por mi cuarenta cumpleaños planearía un viaje a Jordania con Antonio.

Los cuarenta me parecen una edad interesante. Más o menos tienes tu vida encaminada y físicamente no te encuentras mal.

Mis cuarenta han venido con un inicio de año un tanto accidentado, con mucho viaje de Antonio y con cansancio acumulado. Por no hablar del trancazo, la fiebre y la cama.

De todos modos, no me quejo. Rosana (mi prima a la que quiero como si fuera mi hermana) vino a verme y a traerme unos pastelitos que me encantan. Pasamos un rato agradable. Antonio y Diego me dieron a primera hora un regalo. Un tanto excusa por parte de Antonio por no tener tiempo de pensar en algo mejor: unos pendientes y una taza que me hicieron mucha ilusión. Los pendientes, dijo, son un vale por un viaje. No a Jordania. Qué más da dónde.

Al día siguiente vinieron a verme Javier y Natalia (los «cuñaos»). Me hizo mucha ilusión. Un rato tranquilo y muy agradable. Me sorprendieron con una agenda personalizada para mí. Y el día después comimos con mis padres, que me habían comprado una tarta y velas con el número cuarenta. Me cantaron el «Cumpleaños Feliz» y saqué una foto en la memoria: Antonio, Diego, Martín y Bruno y mis padres rodeándome. Click. Foto para la memoria de un momento feliz.

Mi cuerpo estos meses se empeñó en recordarme que me hago mayor. Un buen día bajé al médico y le dije que estaba menopáusica. Él miró mi ficha y me dijo que sólo tenía 39 años. Le expliqué que ya en su día me dijeron que lo más probable es que padeciera menopausia precoz. Me derivó al ginecólogo que me confirmó que mis ovarios no trabajan. Esto, que parece una tontería, me afecta. O al menos me afectó en su día. El hecho de pasar a esta nueva etapa no me hace ninguna gracia. Así que la cabeza empezó a centrifugar sobre la vida en general. Supongo que es natural.

Gracias por acompañarme.

ÚLTIMA HORA: El jueves de la semana pasada llegó un paquete a casa. Era un regalo de cumple de Antonio: un tablet que me ha hecho mucha ilusión y que he podido usar muy poquito aún.

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