No tengo un recuerdo de cómo conocí la música de Prince. Tengo recuerdos aislados. Como aquel concursante del programa 3X4 al que le hicieron una pregunta sobre el vídeo Alphabet Street. No sé de qué manera canciones aisladas se fueron transformando en objeto de admiración.
No tengo ese recuerdo, pero si tuviera que acusar a alguien como si del Cluedo se tratara sería Miguel Ángel en casa de mis abuelos con sus vinilos. Gracias a él descubrí a Prince. No al former artist ni al símbolo. Prince siempre será Prince.
Tengo dos, quizás tres recuerdos muy especiales que hacen que para mí sea un referente. Voy a contártelos cronológicamente:
El primero, cómo no, el concierto del año 90 en el estadio Vicente Calderón. La gira Nude Tour. Fui con mi primo Alfonso; contábamos 16 años así que imagina: éramos los reyes del mundo. Quisimos hacer cola y sobre las 16 horas nos plantamos en una de las puertas. Tuvimos suerte y en cuanto abrieron salimos corriendo a pillar sitio. Y pillamos. Había dos zonas cercanas al escenario delimitadas por vallas. Alfon y yo entramos en la segunda y desde allí disfrutamos primero de Ketama y de Prince después. Recuerdo haber cantado, gritado, … fenómeno fan total. Recuerda la edad: 16 años y ver un concierto de este calibre te marca. En una de las canciones Prince guiñó un ojo y mandó un beso al aire… ese beso nos dio a todas. No te rías. He conocido a chicas que estuvieron en ese concierto y todas me han hablado de la trayectoria de ese beso. No nos equivocamos ninguna. Todas decimos que «ese beso iba a mí». Ahora pienso que es una chorrada pero en aquellos 90 fue tan emocionante.
He encontrado la set list (quién me iba a decir en 1990 que con un click tendría la lista de canciones) y puedes consultarla aquí
Volví a ver actuar a Prince años después en las Ventas, y aunque me gustó no lo disfruté como esa primera vez en el Calderón. Tenía el listón muy alto.
El segundo recuerdo que tengo fue una noche de juerga con Miguel Ángel, Alfonso, Roberto, Manuel y Eva y estar en un Vips a altas horas de la madrugada. Deliberamos sobre si comprar o no el cd Diamonds and Pearls o esperar e ir a Madrid Rock al día siguiente. Al final ganó la edición limitada de la portada con el holograma. Nos compramos el cd esa misma noche. Cd que puse hasta decir basta. Fue una noche genial. La recuerdo así. Con muy buen rollo y el final de fiesta un Cd.
El tercer recuerdo que destaco es en un viaje a Aguilar de Campoo en un Ibiza verde del padre de Antonio. Al volante Antonio, Braulio de copiloto y yo en el asiento trasero. Braulio se encargaba de la sección musical. The Divine Comedy y Prince. Braulio y yo éramos auténticos fans. Él había hecho una recopilación en cassette. Cantábamos las letras que sabíamos de memoria. Antonio dijo:»si al final me va a gustar».
Guardo más recuerdos. Muchos. Como pedazos de sueños que intento juntar en un puzzle. Como la primera vez que Migue fue a Londres y me preguntó qué quería y le pedí una medalla como la de Prince: medalla que me trajo y que llevé tantas veces. Recuerdo ponerme feliz cuando en algún bar se dignaban a poner alguna de sus canciones. Recuerdo cuando Migue tuvo una temporada que me llamaba Anna Stesia, que me quedaba embobada leyendo las letras de sus discos porque «you» era una U «I» era un dibujo de un ojo, «to» era un 2 «for» era un 4 y así todo. Soy consciente de que gran parte del inglés que aprendí fue gracias a él (entre otros); que me hacía gracia sus letras y vídeos subidos de tono como buena adolescente; comprarme el Sign o’the times en cassette porque no me llegaba el dinero para el cd y no querer esperar más; la celebración de un cumple en el que me regalaron una edición preciosa de Alicia en el País de las Maravillas y los cuatro primeros discos: For you, Prince, Dirty Mind y Controversy. Y recuerdo sus pelis. Tan malas ellas que las veíamos con amigos y llorábamos de la risa. Los comentarios eran más que bienvenidos.
Prince falleció ayer. Otro de mis referentes. Me voy quedando sin héroes de infancia.
Esta mañana me ha pasado algo curioso: he ido escuchando, cómo no, Radio 3 de camino a la oficina. Cuando he aparcado justo estaba empezando una canción -de mis preferidas- y no la he escuchado. Nobleza obliga.
Sobre las once me han llamado del cole diciendo que Bruno estaba enfermo y entonces he ido a recogerle. Justo cuando aparcaba al lado del cole la misma canción que tampoco he escuchado por motivos obvios.
La canción habla de una enfermedad de la que no había oído hablar. Y si ves la letra te darás cuenta de que sigue siendo vigente.
Feliz finde
In France a skinny man
Died of a big disease with a little name
By chance his girlfriend came across a needle
And soon she did the same
At home there are seventeen-year-old boys
And their idea of fun
Is being in a gang called The Disciples
High on crack, totin’ a machine gun
Time, time
Hurricane Annie ripped the ceiling of a church
And killed everyone inside
U turn on the telly and every other story
Is tellin’ U somebody died
Sister killed her baby cuz she could afford 2 feed it
And we’re sending people 2 the moon
In September my cousin tried reefer 4 the very first time
Now he’s doing horse, it’s June
Times, times
It’s silly, no?
When a rocket ship explodes
And everybody still wants 2 fly
Some say a man ain’t happy
Unless a man truly dies
Oh why
Time, time
Baby make a speech, Star Wars fly
Neighbors just shine it on
But if a night falls and a bomb falls
Will anybody see the dawn
Time, times
It’s silly, no?
When a rocket blows
And everybody still wants 2 fly
Some say a man ain’t happy, truly
Until a man truly dies
Oh why, oh why, Sign O the Times
Time, time
Sign O the Times mess with your mind
Hurry before it’s 2 late
Let’s fall in love, get married, have a baby
We’ll call him Nate… if it’s a boy
Time, time
Time, time
Fuente: azlyrics